La Iglesia Primitiva.

Tiempo de lectura: 5 minutos

Por: Pastor Romeo Taracena

Iniciamos nueva serie titulada “La Iglesia”. Y ¿Qué es la Iglesia? La iglesia no es el edificio, sino es usted y yo, somos las personas que Cristo vino a salvar y a redimir. Iglesia viene de la palabra griega Eclesía, es decir, los llamados de un lugar a otro. ¡Usted y yo somos la Iglesia!

En medio de la paz somos iglesia, en medio de la persecución somos iglesia; en medio de la abundancia somos iglesia, en medio de la escases somos iglesia; en medio de la pandemia por supuesto que somos la iglesia. ¡En Dios lo mejor viene para la Iglesia!

En la historia de la iglesia se registran varias etapas y en todas estas la iglesia ha sido Victoriosa. Conocemos varias etapas de la iglesia: Iglesia Primitiva, Iglesia Perseguida, Iglesia Imperial, Iglesia Reformada, Iglesia Moderna y actualmente Iglesia Emergente.

Hechos 2:44-47 dice
Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas; 45. Y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno. 46. Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón. 47. Alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos.

El primer tema de esta maravillosa serie se titula “Iglesia Primitiva” o también llamada la Iglesia Apostólica, esta etapa de la iglesia se desarrolló aproximadamente del año 30 al 100 después de Cristo. Se cree que esta iglesia se dio después de la ascensión de Cristo y finalizó tras la muerte del apóstol Juan.

Antes se reunían todos los días, celebrando cada domingo la resurrección de nuestro Señor Jesucristo, los días lunes, martes y jueves se reunían en casas para orar; y los miércoles y viernes se reunían para ayunar; los día sábados se reunían en la sinagoga para aprender más de la palabra de Dios. La Iglesia Primitiva nos dejó ese sentido de unidad imparable en la búsqueda constante a Dios, siendo un solo cuerpo, aún creciendo en medio de la pobreza se ayudaban unos a otros.

Hoy usted y yo debemos recordar lo que nos dejó la Iglesia Primitiva, que es la “Unidad”. Es por esto que se dio su crecimiento impresionante. Cristo mismo enseño acerca de la unidad.

Juan 17:20-21 dice
Mas no ruego solamente por estos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, 21. Para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste.

Amada Iglesia en medio de esta pandemia, aprendamos a fortalecer la unidad unos a otros, porque la unidad trae bendición, trae frescura. Es más fácil estar juntos y vencer los problemas, es más fácil avanzar en medio de los retos, porque si Dios en nosotros y permanecemos unidos ¡esperanza hay!

Como Iglesia hoy tenemos urgencia de unirnos, son tiempos difíciles, tiempos de incertidumbre. El evangelio trae buenas nuevas, trae esperanza. Es por eso que se necesita una iglesia que permanezca unida.

Salmos 133:1 dice
¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía!

Para ser una iglesia que brinde esperanza debemos ser uno en Dios, ser unidos. Le dejo tres consejos para que seamos unidos en medio de esta crisis, en medio de los retos familiares.

1- Respetar a nuestras Autoridades.

Aunque no suene muy espiritual, es la manera que debemos unirnos. Dios dejo instituciones para que sean obedecidas.

Salmos 133: 2-3 dice
Es como el buen óleo sobre la cabeza, El cual desciende sobre la barba, La barba de Aarón, y baja hasta el borde de sus vestiduras; 3. Como el rocío de Hermón, que desciende sobre los montes de Sion; Porque allí envía Jehová bendición, y vida eterna.

¿Dónde esta la bendición de la vida eterna? en vivir bajo autoridad. Debemos ser una iglesia obediente ante las autoridades. Cómo hijos debemos respetar a nuestros padres, como padres debemos respetar a nuestros hijos; reflejando unidad.

Romanos 13: 1-2 dice
Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas. 2. De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos.

¡Seamos obedientes a nuestras autoridades! y Dios enviará bendición a su vida, a su familia, a todos como iglesia.

2- Abrazar la diversidad.

Somos un país con muchas culturas, con rostros diferentes, así es Guatemala. No le hablo de ideología de genero, sino abrazar la diversidad que como país tenemos, como iglesia.

A veces creemos que por ver personas diferentes a nosotros, no son cristianos; pero así es en la casa del Señor, así es la iglesia. Aprendamos a amarnos así como nos enseño la iglesia primitiva. Ayudemos al necesitado y entendamos esas diferencia que existen.

Romanos 12:16 versión Nueva Traducción Viviente (NTV) dice
Vivan en armonía unos con otros. No sean tan orgullosos como para no disfrutar de la compañía de la gente común. ¡Y no piensen que lo saben todo!

Este “común” no habla de las riquezas, sino de los aspectos físicos, las diferentes comunidades que hay, pero somos llamados a abrazarnos como nación, como iglesia.

1 Pedro 3:8 Nueva Versión Internacional (NVI) dice
… vivan en armonía los unos con los otros; compartan penas y alegrías, practiquen el amor fraternal, sean compasivos y humildes.

3- Levantar al caído.

Levantar al que no puede seguir en medio de esta situación. Seguramente no podemos ayudar a todo el mundo, y a veces la carga es pesada, pero la unidad de la iglesia primitiva era que todos vendían sus propiedades y se ayudaban el uno al otro, entendamos que había un corazón para ayudar al pobre; nosotros hoy podemos ayudar a aquel que tiene necesidad, ayudar al que tiene desanimo espiritual.

Le recuerdo la historia de cuatro amigos que nos muestran la calidad que un ser humano tiene para ayudar a levantar al caído; dice la Escritura que Jesucristo se encontraba predicando en una casa y estaba compartiendo las buenas nuevas, este lugar se lleno a reventar; y estos cuatro amigos llegaron con un enfermo, paralitico que nunca había caminado, y cuando vieron que la casa estaba llena dice la Escritura…

Marcos 2:4 versión Traducción Lenguaje Actual (TLA)
Como había tanta gente, subieron al techo y abrieron un agujero. Por allí bajaron al enfermo en la camilla donde estaba acostado.

Estos cuatro hombres no solo levantaron al caído, enfrentaron los obstáculos esforzándose para dar solución y ayudarlo. ¿Qué nos falta para tener unidad como iglesia? ¡Levantar al caído!

Hay personas que están caídas y lo saben, pero hay personas que están caídas y no se han dado cuenta. Usted y yo somos llamados para guardar la unidad y levantar al caído. Con lo mucho o poco que Dios nos ha dado debemos ayudar al caído, al necesitado.

Marcos 2:5 versión Traducción Lenguaje Actual (TLA) dice
Cuando Jesús vio la gran confianza que aquellos hombres tenían en él, le dijo al paralítico: “Amigo, te perdono tus pecados”

Marcos 2:11 versión Traducción Lenguaje Actual (TLA) dice
“Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa”

Cuando usted y yo respetamos la autoridad, abrazamos la diversidad y levantamos al caido llevándolo ante Jesucristo, no juzgando sus fallas, no criticando, haciendo lo posible en acercarlo a Jesús; Entonces Él lo levantará.

Unámonos como iglesia, empezando desde casa, animando a nuestros hijos, hijos animando a nuestros padres. Hagámonos disponibles para llevar a los caídos delante de Jesucristo.

Marcos 2:12 versión Traducción Lenguaje Actual (TLA) dice
En ese mismo instante, y ante la mirada de todos, aquel hombre se levantó, tomó la camilla y salió de allí. Al verlo, todos se quedaron admirados y comenzaron a alabar a Dios diciendo: “¡Nunca habíamos visto nada como esto¡”

Muchos caídos se levantarán a través de la iglesia; Hoy Dios esta tocando nuestro corazón para ser unidos obedeciendo a nuestras autoridades, abrazando la diversidad, levantando al caido, tomando el ejemplo que nos deja la iglesia primitiva, siendo verdaderos cristianos. ¡Reflejemos a Jesucristo!

¡En Dios somos una iglesia Victoriosa!